RESEÑA DEL LIBRO: UN NUEVO SENTIDO DE REALIDAD: EL DILEMA DE LO HUMANO EN LO SOCIAL

RESEÑA DEL LIBRO: UN NUEVO SENTIDO DE REALIDAD: EL DILEMA DE LO HUMANO EN LO SOCIAL

Books Review: A new sense of reality: The dilemma of the human in the social

Autor: Dr. Francisco Letelier

Editorial: Ediciones UCM. 2023. 96 pp.

 

fecha recepción: 11 de octubre de 2023 / fecha aceptación: 11 de noviembre de 2023

Por Felipe Saravia-Cortés1

 


Cómo citar este artículo:

Saravia-Cortés, F. (2023). Reseña del libro: Un nuevo sentido de realidad: El dilema de lo humano en lo social. Revista Pensamiento y Acción Interdisciplinaria, 9(2), 118 -121. https://doi.org/10.29035/pai.9.2.118

 

 

Francisco Letelier, sociólogo y doctor en geografía y planificación territorial, escribe un libro que trasciende su ámbito disciplinario. Escribe sobre el sentido de lo humano en un formato relativamente accesible para lectores no académicos. Propone tres ideas principales: a) que lo humano es una realidad anterior a lo social y posee una cierta naturaleza: la necesidad y capacidad de dar sentido a la realidad implicándose concreta y creativamente en la producción de la existencia; b) que la esfera comunitaria, es decir, el ámbito de las relaciones basadas en la colaboración, que satisfacen necesidades colectivas e individuales con autonomía relativa (no total) de la lógica del capital-mercado y del Estado, es propicia para la realización humana; y c) que así como la sociedad debe aproximarse a lo comunitario para generar mejores condiciones para la realización humana, el ser humano debe, a su vez, aproximarse a su naturaleza para experimentar la realización.

Para desarrollar estos argumentos, Francisco se acerca a autores de diversas disciplinas y ámbitos, como la psicología y psicoanálisis, sociología, biología, filosofía, además de referir a distintos tipos de espiritualidades y hacer uso de referencias fílmicas contemporáneas (El viaje de Chihiro, Matrix, The Truman Show). En este sentido, creo que se trata de una apuesta osada. Como reconoce en el libro, no siempre es bien visto en ciencias sociales salirse de los márgenes disciplinares. Recuerdo, por ejemplo, cierta vez que en el marco de una exposición que hice como estudiante de doctorado en ciencias sociales, al referenciar a autores potencialmente fuera de los márgenes como Erich Fromm o claramente externos como C.S. Lewis (su obra teológica especialmente) o John Stott, recibí comentarios por parte de académicos de estar exponiendo ‘en otro registro’, lo que en buen chileno sería algo así como “fuera del tiesto”. Como muestra Bourdieu en su clásico Homo Academicus, en el campo académico existen reglas del juego que hay que respetar si se quiere llegar a tener ‘un nombre’. Salirse de los márgenes implica un riesgo en este sentido.

El libro es valioso porque conecta los intereses espirituales del autor con su línea de trabajo sobre asuntos vecinales y comunitarios, y porque rescata discusiones antiguas sobre la cuestión humana. Erich Fromm, por ejemplo, un autor que Francisco cita en varias ocasiones, hoy por hoy no es comúnmente referenciado en las discusiones en ciencias sociales, a pesar de haber desarrollado una obra crítica de altísima densidad y profundidad. Quizá una de las razones por las que este tipo de discusiones no son comunes en las ciencias sociales chilenas hoy, es precisamente porque estamos atrapados en los procesos de enajenación que el libro describe como la preeminencia del ‘yo egótico’ inmerso en un ciclo vertiginoso de emprendimiento de sí mismo y consumo, que ha sido descrito de forma similar por Barbara Seeber y Maggie Berg en su libro ‘The Slow Professor’, en el que luego de caracterizar y criticar cómo la lógica neoliberal ha permeado la academia en términos generales, proponen algunas salidas al actual escenario, a las cuales tengo algunas críticas que son también para el libro de Francisco.

La principal crítica tiene que ver con la salida propuesta. Se propone que lo comunitario (como esfera de la vida y como proceso más que como sustantivo cerrado) sería la vía que permitiría un mayor acercamiento a lo humano, que se ha perdido en el contexto contemporáneo. Es decir, la práctica de hacer/ser comunidad permitiría hacer carne la visión espiritual que el autor plantea: ‘Un viaje de autoobservación y autoconciencia que permita poner entre paréntesis el papel que la sociedad capitalista nos impone como sujetos emprendedores-consumidores y experimentar un encuentro genuino con el entorno, con los otros y con nosotros mismos, más allá del «yo egótico». Esto es lo que entiendo por espiritualidad› (p.75,76). Repetidamente el autor indica al capitalismo como principal factor causante de la enajenación social, comunitaria y espiritual que describe: ‹Necesitamos reconectarnos con la producción de nuestra existencia, estar en tiempo y en espacio presentes. Pero la sociedad capitalista nos seduce a ir a otro tiempo, el futuro, y a otro lugar, muchas veces virtual. Un tiempo y lugar donde seremos realmente felices. El capitalismo es una enorme fuerza centrífuga que nos desancla y nos lleva incluso a creer que podemos prescindir de un territorio, que somos una especie de seres-flujo, que podemos estar en cualquier parte. Finalmente, no estamos en ninguna› (p.45). Se trata de un argumento coherente con el trabajo que han realizado otros autores como Fromm, y es fácil encontrar rápidamente ejemplos de cómo ello se expresa en la vida cotidiana de cualquier habitante de Chile. Sin embargo, la respuesta que el autor propone a ello no es una clara posición anticapitalista que se interrogue sobre cómo el capitalismo puede ser superado, sino más bien sugerencias para que -a pesar del contexto capitalista- pueda fortalecerse una esfera comunitaria que nos permita reconectar con aquello que denomina como lo humano. Cabe preguntarse entonces si, en realidad, lo que el libro apunta como causa de la enajenación descrita, no es el capitalismo a secas, sino más bien el neoliberalismo. Eso sería más coherente con las estrategias propuestas, porque ¿es factible pensar el derrocamiento del capitalismo vía fortalecimiento de la esfera comunitaria? ¿O más bien se trata de lograr por fin una moderación del modelo económico-societal que nos rige desde hace cinco décadas, del cual Chile ha sido un experimento?

Para esto último, hay experiencias internacionales comparadas que permiten vislumbrar estrategias viables, especialmente en el contexto de los estados de bienestar europeos, en los que el Estado se pone a disposición para generar políticas y programas concretos que favorecen el florecimiento de la esfera comunitaria. Como se aprecia, hay una discusión política de gran magnitud que se conecta con las propuestas hechas por el autor. Sin embargo, estas no son abordadas en el libro porque no es su intención, pero ameritan discusiones serias si ha de proseguirse en esta línea de reflexión.

Adicionalmente, creo que resulta discutible el primer argumento planteado: que lo humano (asociado a la conciencia y espiritualidad) es anterior a lo social (asociado a los vínculos entre humanos). Entiendo que el argumento busca contraponerse a una cierta postura sociológica hegemónica que ha negado aquellos asuntos que no pueden ser fácilmente abordados en los términos científicos propios de las ciencias sociales, pero su sustento depende de una discusión más profunda sobre qué entender por sociedad. Si la sociedad no es solo procesos contingentes, sino acumulación espacio-temporal de vínculos entre humanos y entre seres humanos y no humanos, quizá la pregunta misma de si lo humano es anterior a lo social ya no tiene sentido, porque pueden devenir en expresiones de un mismo gran fenómeno. En este contexto, el diálogo con el campo de investigación sobre la naturaleza y origen de la conciencia humana puede resultar estimulante.

Con todo, agradezco la lectura de este libro. En un contexto en el que el neoliberalismo ha impregnado profundamente la vida social, comunitaria, familiar y laboral de la sociedad chilena, Francisco hace un llamado a hacernos cuestionamientos profundos, no solo en términos abstractos sino interpelando nuestras prácticas cotidianas que, dado el estado actual de cosas, tienden a reproducir el capital.

 

Referencias bibliográficas

Letelier, F. (2023). Un nuevo sentido de realidad: el dilema de lo humano en lo social. Ediciones UCM

 

Dirección de correspondencia:

    Por Felipe Saravia-Cortés

    Contacto: fsaravia@ubiobio.cl

Esta obra se encuentra bajo una Licencia de Creative Commons

Reconocimiento-No Comercial-Compartir Igual 4.0 Internacional

 

 

1  Trabajador Social, Magíster en Desarrollo Local y Regional. Doctor en Ciencias Sociales en Estudios Territoriales. Académico del Departamento de Ciencias Sociales, Universidad del Bío-Bío, Concepción, Chile.
ORCID: https://orcid.org/0000-0003-3196-7831. Correo electrónico: fsaravia@ubiobio.cl